21 de febrero de 2010

Para el que lo mira por TV

Hace como diez años que espero este momento. El fin de semana próximo me voy a ver a Coldplay a Buenos Aires. La última vez que hice semejante salvajada de gastar guita en pasajes+entrada fue para ir a ver U2 en River, en 1998. Un show que todavía está grabado en mi ADN. Sí sí. Mis hijos van a recibir genéticamente un poco de lo que viví ese 6 de febrero hace más de una década atrás. Ahora se viene la segunda mejor banda del mundo y ya estoy sintiendo las hormigas caminando por mis brazos, imaginando el momento en el que Chris Martin salga al escenario con esa chaquetita chic y la remera blanca. Lo mismo me pasó con Bono. Hormigas por todo el cuerpo y boca que no se cierra durante horas.

En mi “corta” vida he visto bandas de todos los colores y formatos, desde conjuntos locales que tiraban covers en María María, pasando por los grandes grupos nacionales, hasta llegar a los cuatro irlandeses que siguen rockeando a pesar de los años y de las pérdidas de los ideales. Pero me faltaban ellos. Y Nirvana. Pero Cobain se tomó el palo antes de tiempo. Una lástima.

Para los poco afortunados como yo, hoy domingo 21 de febrero MuchMusic emitirá un concierto exclusivo de una hora que el grupo brindó en la puerta de los estudios BBC de Londres. El show (que va a las 14, 17 y 20 horas) fue grabado en junio de 2008, antes de la salida de su último disco “Viva la vida or Death and All His Friends” a modo de carta de presentación ante unos pocos privilegiados de vivir en la capital inglesa y que justo pasaban por allí. “Escuché música y paré. Ah! Mirá. Es Coldplay”. Una de las locas ventajas de vivir en Europa.

El recital está super. Te lo recomiendo, más si sigue lloviendo. Yo, por mi parte, nunca voy a olvidar el momento en que escuché por primera vez “One” de U2, como tampoco jamás voy a olvidar el momento en que escuché por primera vez “Yellow” de Coldplay. Ambos fueron instantes en que uno sabe que la vida cambia. Para bien.

20 de febrero de 2010

Volveré y seré celuloide

Fue elegido por la revista People como el "hombre más sexy" en 1985 y uno de los tipos "más lindos del mundo" en 1991, 1992 y 1996. Se dio el lujo de rechazar el papel del primer Terminator, que luego hizo Arnold Chorseneguer. Nos regaló roles memorables como el de Dale 'Mac' McKussic en “Traición al amanecer”, el Sargento Martin Riggs en “Arma Mortal”, Justin McLeod en “El hombre sin rostro”, Nick Marshall en “Lo que ellas quieren”, y William Wallace en “Corazón Valiente”. Besó a mujeres como Michelle Pfeiffer y Julia Roberts. Ganó dos Oscar y un Globo de Oro. No hubo mina en los ’90 que no babeara por él y su hermoso trasero. Un buen día vino y dijo “me retiro de la actuación y me dedico a dirigir”. Yo lloré, de pena.

Después despachó productos como la fanática “Pasión de Cristo” y la invisible “Apocalypto”. Un día se chupó, se subió al auto y cuando lo arrestaron, regañó a una mujer policía llamándola “senos jugosos” y culpó a los judíos de todos sus problemas. Conducía su Lexus LS a más de 160 kilómetros por hora mientras tomaba una botella de tequila. Con ello se unió al club de las celebridades que tuvieron que pedir disculpas públicas por su comportamiento errático y políticamente incorrecto (léase Hugh Grant, Tiger Woods, Christian Bale). No vaya a ser que la industria y la sociedad pacata yanki se enojen… Allí volví a llorar, pero de lástima.

También se buscó una novia nueva y fue padre de su octavo hijo hace unos meses. Finalmente, tras siete años fuera de la pantalla grande y 54 años de edad, vuelve Mel Gibson. Lo hará en pocos días, cuando estrenen en Argentina “Al filo de la oscuridad”. Más viejo, sin tanto pelo, cargando una pistola, pero con los mismos ojos azules de siempre. Esta vez, cuando me enteré, lloré de felicidad.

16 de febrero de 2010

Kill Bill

Una vez leí una encuesta que aseguraba que era mucho más seguro morir a manos de un conocido que de un extraño. El estudio no había sido hecho en Argentina, sino en Europa, pero me llamó la atención el dato. Los crímenes pasionales, familiares, motivados por dinero o por celos, estaban en el tope de la lista.

De estas características son la mayoría de homicidios que protagonizan las “Mujeres Asesinas”, esas que tan crudamente fueron descriptas por la autora argentina Marisa Grinstein y que tan brutalmente son llevadas a la pantalla por Pol-ka en Canal 12. Vos me tildarás de feminista, pero siempre estuve convencida de que este mundo sería más pacífico si el sexo “débil” guiará sus destinos.

En Colombia se realiza desde hace varios años la “Noche de solo mujeres”, en la que los hombres se quedan en casa, las chicas salen de joda y (casualmente) disminuyen los índices de criminalidad. ¿Cuestión de fuerzas? ¿De naturalezas? ¿Reminiscencias de la sociedad patriarcal? ¿Sometimiento hereditario? Llamalo como más te guste.

Yo creo que a una mina la tenés que llevar al extremo de la humillación, la denigración y la violencia para que agarre un cuchillo y te lo clave por la espalda, o para que te pegue un tiro en la cabeza, o para que te ponga veneno en el café y se te quede mirando. Nunca falta una loca por ahí, pero la mayoría de las protagonistas de este unitario, basado en historias reales, fueron víctimas previas a los crímenes que cometieron. Con muchas otras, la pregunta siempre quedará flotando en el aire: ¿Qué demonios te lleva a aniquilar a tus hijos, a tus padres, a tu pareja, a tus amigos? De todas formas, quieras o no, las mujeres ocupan en nuestro país menos celdas que los hombres.

En fin. Es de lo mejorcito que dan por la TV abierta y siempre es bueno ver a actrices argentinas de primer nivel sin tanta producción y maquillaje encima. Se parecen más a una, qué querés que te diga.

La pasan los martes a las 23.30 por Canal 12. Agarrá papel y lápiz, porque nunca se sabe… (je)

Bailando por un sueño

¿Cuánto has hecho en tu vida para complacer a tus padres? ¿Te pusiste a pensar en eso alguna vez? Cuántas decisiones tomaremos pensando en agradarles, en que se sientan orgullosos. Cuántas cosas haremos sin darnos cuenta. Y cuántas otras sabiendo que vamos a transgredir las barreras. La mirada paterna es una mirada amorosa, pero a veces es una inquisición robusta e insidiosa que pesa sobre los hombros. Está ahí, heredada como el idioma que hablas y el lugar donde naciste.

Eso le pasa a Billy Elliot, un pendejo inglés, que en una de esas eventualidades reveladoras de la vida, descubre que lo suyo es el ballet. Pero su padre, uno de esos personajes que te van estrujar el corazón desde el minuto uno hasta el final de los créditos, quiere que el chico haga boxeo, o juegue al fútbol, capaz como un David Beckham o un Peter Shilton. Pero Billy no le va a dar pelota. Y el viejo va a descubrir que llega un punto en el que las decisiones de los hijos son suyas propias, pero también va a descubrir que desde que esas personitas nacen, nunca se deja de ser padre.

A veces el cine británico trae sorpresitas. Esta es una de ellas. En medio de una Inglaterra obrera, fría, pobre, con cielos nublados y huelga de mineros, el “Lago de los Cisnes” nunca sonó tan bello.

Tenés que verla. La pasan por I.Sat, The Film Zone, FOX y AXN durante febrero y marzo.

14 de febrero de 2010

All You Need Is Love

Bueno, capaz esta mañana tu media naranja te despertó con un desayuno sorpresa en el único día que podés dormir hasta las 12. O quizás estás por recibir una docena de rosas rojas con una tarjeta que dice: “La pasé re bien anoche”. O mejor aún, más tarde te espera una cena románica en uno de los lugares más chetos de Córdoba, o lingerie sexy en un paquete al lado de la cama.

Si vos sos uno/a de esos afortunados/as, me cago en vos. Pero si estás solo, sola, amargado o amargada y el Día de San Valentín te agarra en pelotas y sin nadie que te rasque la espalda, acá va una lista de todas las películas que podés ver por la tele hoy. Después no me digas que no te avisé.

Para inexpertos: Hitch, por People + Arts a las 14.
Para optimistas: Muy parecido al amor, por TNT a las 15.
Para lúgubres: Otoño en Nueva York, por Cosmopolitan a las 15.
Para científicos: Sexo salvaje, por Natgeo a las 15.
Para veteranos: No me mandes flores, por TCM a las 15.30.
Para inseguras: Amores, enredos y una boda, por canal 12 a las 16.30.
Para cínicos: Loco por Mary, por TNT a las 17.30.
Para excéntricos: Amor ciego, por FOX a las 17.30.
Para amantes del clásico: Cuando Harry conoció a Sally, por MGM a las 17.30.
Para románticos: La Casa del Lago, por Warner a las 18.30.
Para deshonestos: El amor cuesta caro, por MGM a las 20.
Para giles: Especial. Michael Bublé, por MuchMusic a las 20.
Para golpeadores: Sr. y Sra. Smith, por Teleocho a las 20.15
Para nostálgicos: Despabílate amor, por Volver a las 22.
Para estudiantes de Cine: Casablanca, por TCM a las 22.
Para sarcásticos: Especial de Padre de Familia “Desamor”, por FX a las 22.
Para risueños: Realmente amor, por MGM a las 22.

Para los que se perdieron el primer capítulo: 6ta temporada de Lost, por AXN a las 21.

Y para los que les importa un pito todo esto: Clausura 2010. Boca vs. Atlético de Tucumán, a las 19:10; y Colón vs. River a las 21.15 por Canal 7.

Suerte.

(Imagen: Couple Kissing de Phillip Dvorak)

10 de febrero de 2010

Creer o reventar

Dicen que las brujas no existen, pero que las hay, las hay. Yo no creía en brujas hasta el año pasado, cuando me senté en frente de una, que me dijo todo lo lindo y lo feo que me iba a pasar en los meses siguientes. Y le pegó. Vaticinó un nuevo integrante familiar, enfermedades, problemas legales, amores irrisorios, ataduras y mucho laburo. Creer o reventar, se cumplió todo. Sin embargo, sobre lo único que quería saber, me dijo “puede ser”, como para que no fuera llorando después de garpar por el servicio.

Ya hacia finales de año, repasando lo que había pasado, decidí no volver nunca más. Si los presagios iban a ocurrir de todas maneras, entonces ¿para qué adelantarse a lo inevitable? Simplemente tomás lo que viene, al menos así te agarra con sorpresa.

Bueno, esta película “La llave Maestra” es sobre brujos y brujerías. En Nueva Orleáns, esa ciudad que se hizo famosa por el Katrina, pero que siempre albergó (como en Brasil) esa mística africana que la hace única, una chica, Kate Hudson, se busca un laburo honesto: cuidar a un ancianito apopléjico en una plantación misteriosa.

Ella no cree en sortilegios y magias, pero algo raro pasa en la casa. No hay espejos, no se puede abrir la puerta del ático y el viejo parece cómo que quiere decir algo, pero babea y no suelta una palabra. Me gustó. Kate Hudson tiene huevos, llama al 911, se escapa, investiga y no ejecuta los clásicos clichés de las películas de terror. Y el final es impensado. Linda para ver una noche sin luna.

La pasan este mes por Universal Channel y AXN.

9 de febrero de 2010

Por fin

9 meses. Un embarazo. Una puede tener un hijo en el tiempo que tarda el comienzo de cada temporada de “Lost”. Pero una se lo banca, porque POR FIN sabe que esta vez termina y POR FIN prometen resolver todos los misterios.

Este verano estuve repasando un poco las maratones de AXN para ver si me acordaba de algo, y no, no me acordaba de nada. Hay enigmas destacables, como el humo negro, el padre de Jack, el Locke que está muerto, el amigo/enemigo de Jacob, la guitarra que lleva Hurley en la vuelta a la isla; pero mi hermana (más fanática que yo) descubrió cosas que yo ni sabía que habían pasado. Y encima me reta: “¿¿Cómo no te vas a acordar de esto??”. “Y no pelotuda, lo vi hace como cuatro años”.

En fin, ya siento el hormigueo, la excitación y esa mezcla dulce de melancolía y emoción, como cuando un libro se está por terminar.

Mi teléfono estará prendido esta noche entre las 21 y las 23, porque igual nunca me llama nadie, pero si se te ocurre algo para decirme esperá que termine el primer capítulo de la sexta temporada de una de las mejores series de la historia. Después hablamos.

Volvió el doctor Lightman

Si en Argentina hubiera científicos como el que hace Tim Roth en la serie “Lie to me”, terminamos todos presos. Claro, el petizo, que está hermoso, puede descubrir a un mentiroso tan rápido como la "Nana Fine" descubría a un hombre soltero aunque el tipo tuviera la mano izquierda en el bolsillo. Pero a veces se ceba. El personaje termina siendo tan insidioso y petulante como el Doctor House o los investigadores de CSI: no se les escapa nada, son infalibles, siempre resuelven todos los misterios y siempre tienen razón. Está bien que uno ande buscando ficción, pero terminan aburriendo.

Ayer lunes empezó la segunda temporada de la serie por Canal Fox, a las 22. Si no viste la primera no importa, porque no tiene mucho que seguir, pero espero que en esta parte le agreguen un poco de romance, porque para ver ciencia pura, mejor pongo el Discovery Channel.

Aguante Tim Roth, si no fuera por el, paso.

Me quiere, no me quiere

Joaquín Sabina, uno de los más grandes trovadores del desamor, confesó recientemente que para componer su último álbum debió inspirarse en un amigo de sufría de “corazón roto” porque de lo contrario, no tenía de qué changos escribir. Unos cuantos cientos de años antes, Walt Whitman ya había apuntado uno de sus mejores versos: “Pero ahora creo que no hay amor no correspondido / La retribución es segura, de uno o de otro modo / (Amé ardientemente a una persona y mi amor no fue Correspondido / sin embargo, aquel amor ha hecho que escriba estos cantos)”.

En alguna parte ambos tienen razón, el sufrimiento inspira muchas veces más que la felicidad. Eso es lo que le pasa a Diane Keaton en “Alguien tiene que ceder”, cuando se enamora de un viejo chauvinista como Jack Nicholson. Después que el tipo la patea, porque está kun-fu-ndido, ella escribe una de sus mejores obras de teatro. Y encima comienza un romance con Keanu Reeves, que en esta película no corre, pero vuelve a vestir unos jeans que le quedan calcados y saluda con un durazno en la mano.

Ya sabemos que Jack Nicholson integra el denominado -por mí- “Grupo de los Cuatro Veteranos” que pueden remontar cualquier escena con solo poner su presencia. Los otros tres son De Niro, Pacino y Hoffman. De ahí, que esta película cause gracia y valga la pena para pasar el rato. Me gustó. Sin embargo, si hubiera sido por mí, yo al final me quedo con Keanu Reeves. Pero esa conclusión hubiera sido políticamente incorrecta, porque el tipo tenía 20 años menos que la protagonista. Capaz los autores tendrían que haber hablado con Alfano-Ale antes de escribir el guión.

PD. La dieron ayer en el marco de la programación rosa por el Día de San Valentín, y los del castos del canal Warner (además de pasarla doblada al castellano) tuvieron la indecencia de censurar la parte del hospital en la que a Jack Nicholson se le ve el culo, uno de los mejores gags de la película. Sacrilegio.

7 de febrero de 2010

Corre, Keanu, corre

Hace unos años estrenaron en el cine la película “La Casa del Lago” de Alejandro Agresti y que reunía por segunda vez a esa pareja top que alguna vez anduvo en el colectivo magnífico a más de 50 millas por hora: Keanu Reeves y Sandra Bullock. Y yo tenía ganas de ir a verla. Entonces llamo a mi primera elección de compañía y me dice que ni en pedo gasta plata para ver una de amor en el cine. Una rata. La segunda opción me cortó el rostro argumentando problemas con los hijos (las minas casadas siempre tienen como excusa a los hijos, aunque los pendejos la pasen mejor en la casa de los abuelos que en la propia). Otra rata. Así que abandonada pero determinante, decidí ir sola al cine. Me armé de coraje, junté los billetes para el pururú y me fui.

Ahhhh, y no me arrepentí. Qué linda, qué linda. Hay escenas que nunca fallan, una de ellas es ver a Keanu Reeves corriendo desde atrás y desde adelante. Fascinante. Produce en mí una sensación similar a la de comer helado de chocolate en la playa. Yo no sé si es la percha que tiene, pero los jeans en esas piernas medias chuecas le quedan divinos. Cuando veo “Máxima Velocidad”, espero siempre la parte que corre. Cuando veo "Punto Límite", igual. En esta película también corre. Puro y genuino alborozo.

El filme es lindo, los dos personajes se conocen a través del tiempo y se comunican mediante un buzón, es medio obvio, tiene algunas cosas ridículas, pero repito, Keanu corre. Es como cuando Brad Pitt llora, George Clooney habla, Jude Law besa, James Bond se saca la remera, Bono canta y Matthew McConaughey sonríe. Un placer.

La pasan por Warner Channel el sábado 13 de febrero, a las 23 y el domingo 14, a las 18:30. (Semana romántica: agarrarse)

6 de febrero de 2010

Maldita Arca de Noé

Se viene el Día de San Valentín. Qué querés que te diga: un día de mierda. Nunca vi que un festejo comercial genere tanta controversia. No es como las otras celebraciones. Tomemos como ejemplo el Día del Niño. Si tenés pendejos en la familia vas y les compras algo de 5 pesos y los hacés felices. Si no hay chicos, ni te enterás de las festividades, salvo que salgas justo ese día al shopping a buscar de urgencia un cartucho para la impresora y te encontrás con que no podés caminar ni entrar a un negocio. Otro ejemplo: el Día del Amigo. Todos tenemos uno, aunque sea un perro, con quien decirse cosas lindas y tomarse una cerveza.

Pero el Día de los Enamorados genera una suerte de casta preferencial: tenés o no pareja. Si la tenés festejas, sino sos un paria. Y esto no hace más que profundizar y legitimar la leyenda del Arca de Noé: “Un macho y una hembra de cada especie”, dijo Dios. Dos es mejor que uno. Y claro, los solteros y solteras que andan dando vueltas por ahí se rebelan contra semejante discriminación y salen a reclamar fiestas paralelas de personas “libres”, donde seguro después terminan encamados con alguien, y allí una de las grandes paradojas de este mundo.

Otros se deprimen, compran helado, se ponen un disco de Sabina y se torturan recordando esa gente que pasó por sus vidas y de las que capaz ni se acuerdan el nombre, pero “qué dulce qué era…, incluso cuando me dejó porque yo era mucho para él/ella”. Y mi palestra preferida: recién estás saliendo con alguien y esa noche cómo quien no quiere la cosa, fuiste a comer algo por ahí y justo derrapa por tu mesa el viejo que vende rosas: “Una flor para la dama”. Y el flaco va a quedar mal siempre, porque si la compra es un cursi de mierda, pero si no la compra es un insensible hijo de puta. Así somos las minas. Así es la vida.

En fin. La televisión no escapa a este fenómeno y va a estar pasando en la semana todas esas películas con finales de cuento de hadas. Pero yo te recomiendo, si no querés pasar por ninguno de los estadios antes mencionados, que te quedes a ver “Sexo Salvaje” el especial que Natgeo pondrá al aire todos los domingos de febrero a las 15. El programa promete revelar “las increíbles estrategias utilizadas para asegurar el éxito en el competitivo mundo del sexo”. Obviamente, los protagonistas son animales. A lo mejor aprendemos algo.