27 de abril de 2010

Titulares de segunda al voleo

Quedan solo seis capítulos de “Lost”. Sí, leíste bien: seis. Ya termina. Y todavía yo no entiendo un pito.

Se viene la remake de “Brigada A”. Cuando me enteré que Liam Neeson personificará al Coronel Smith se me cayó una lágrima. Todavía no sé si por la emoción o por el espanto.

Bret Michaels sigue hospitalizado. Hoy me acordé cuando los chicos de “Poison” fueron a “Ritmo de la Noche” y después de hacer playback, hicieron cagar todos los instrumentos del canal. Dos palabras para Tinelli: “Unskinny Bop!”. Nunca se supo qué significaba. Capaz era: “Chupame un huevo!”.

Luis Miguel sigue sin aparecer… Lo que sí apareció fue el cadáver de un tal Luis, de apellido Miguel, en la morgue de Los Ángeles, a quien se le ocurrió morirse justo cuando el famoso se ha esfumado.

Whitney Houston dice que reza para que su voz de soprano regrese y pueda volver a cantar Endaaaaaaaiiiiiiaaaaaawillllllllalweissssloooooveeeeiuuuuuuu de un solo saque. Pero parece que Dios está de vacaciones. O capaz buscando también a Luis Miguel.

Aparecieron fotos hot de un supuesto Ricky Martin haciendo una fellatio. Yo me pregunto: ¿A quién le importa? El tipo sigue cantando bien.

Dicen que Tom Cruise es gay. Yo me pregunto: ¿A quién le importa? El tipo sigue sin actuar bien.

Orteguita volvió a chocar el auto. Pónganle un chofer a ese pibe…

Juanita Viale y Gonzalo Heredia sacan chispas en “Malparida”… soy burra, ya me enganché…

Pacino cumplió 70 y tiene una novia argentina de mi edad. Hoy me pregunté a mí misma qué se sentiría besar a un tipo de 70, y se me frunció el labio.

Nico se fue de la tele, o la tele se fue de Nico. El que vuelve es Ricardo Fort como jurado de “Bailando por un Sueño”. No todas son buenas noticias.

Yo no tengo una discográfica, pero si la tuviera, promocionaría ya mismo el temazo que escribió desde la cárcel Mario Vittete Sellanes, el presunto ideólogo del asalto al Banco Río de Acassuso en 2006.

Una confesión al voleo: soy fan de la página de Facebook de Ashton Kutcher, y amo que el chico deje mensajes en español...

La debacle total

Varias historias sobre devastación humana andan dando vueltas por la televisión de cable. Tres de ellas llamaron mi atención, más que nada por las preguntas que te dejan picando: ¿somos muchos ya? ¿La Naturaleza se está cobrando los daños que le hemos hecho? ¿Existe esperanza para la humanidad?

La primera, "Soy leyenda" (I am legend), cuenta una historia parecida a la “Naúfrago” de Tom Hanks, pero en otra isla: Nueva York. El célebre y musculoso Will Smith se queda solo en la ciudad (creo no equivocarme si digo esto) más utilizada para ambientar películas sobre cataclismos, luego de que un virus bastante destructivo matara a la mayoría de los seres vivos y convirtiera al resto en monstruos asesinos que viven en la oscuridad. Buuuuu. Y Will Smith, que justo da la casualidad de que es un científico, anda paseando por un desierto Manhattan buscando una cura, en compañía de su perra, que se llama Sam (porque ponerle Wilson era un poco obvio). En fin, lo interesante de este filme, más allá de que el argumento es archiconocido, es que Will Smith logra cargarse el monólogo al hombro. Yo pensaba que el único que podía hacer eso era Tom Hanks, pero este otro se la banca, y muy bien. Y vos decís, más allá de los efectos especiales, una película con pocos actores te debe salir barato, pero Will Smith solito cobra 20 millones de dólares por película. Así las cosas.

La otra, “El fin de los tiempos” (The Happening) también ambientada en la misma ciudad norteamericana, trata sobre una supuesta “venganza” de la Naturaleza, que con el fin de quitarse al Hombre de encima, libera una toxina de los árboles que hace que la gente se suicide. Chuiiiiii. Está protagonizada por el también célebre y musculoso Mark Wahlberg, que es un profesor de ciencias (otra casualidad), y dirigida por el super-controvertido M. Night Shyamalan, que después de hacer “Sexto Sentido” fue defenestrado en todas sus siguientes producciones, pero quieras o no, a mí algunas veces me deja pensando.

La tercera es lejos una de las mejores que he visto en mucho tiempo: “Niños del Hombre” (Children of Men), de Alfonso Cuarón y con estelares de Clive ‘Madera’ Owen, Michael ‘Señor Inglés’ Caine, y Julianne ‘Pecas’ Moore. El mundo, envuelto en caos y guerras internas, se ha quedado sin niños y sin posibilidades de procrear, no porque nadie tenga ganas de pasar un buen rato, sino porque parece que no se puede. Pero Clive tendrá a cargo llevar a la única mujer embarazada hacia un lugar seguro y así salvar a la humanidad. Bien por Clive, pero mejor por Alfonso, que se pasa con la edición y la cinematografía de esta cinta que tuvo tres nominaciones al Oscar en 2006.

En definitiva, si estás con espíritu desolador, y no te enganchaste todavía con “Malparida”, podés encontrar estas tres piecitas en el cable durante lo que queda de abril y mayo.
  • “El fin de los tiempos”, el jueves 29 de abril, a las 22:00 hs, por Cinecanal.
  • “Soy leyenda”, el domingo 2 de mayo, a las 22:00 hs, por Cinemax.
  • “Niños del Hombre”, el viernes 28 de mayo, a las 00:35 hs, por TNT.

24 de abril de 2010

Mentime, que está de moda

Muchas veces, cuando se habla de infidelidad en la pareja, me llama la atención que se haga mención al acto adúltero en sí mismo, que en una sociedad monogámica como la nuestra es por cierto doloroso y denigrante para el afectado. Sin embargo, muy pocas veces se analiza la mentira de la que es víctima una de las partes involucradas, en ese caso aquella a la que le “meten los cuernos”, y que para mí sigue siendo peor que ser "un gorreado/a".

Cuando vi esta publicidad -que pego más abajo- quedé anonadada. Un grupo de empresarios, creativos, etc. de la cerveza mendocina “Andes” inventó el “Teletransporter”, una cabina acústica (realmente muy original y nunca vista antes), que se ubica dentro de un bar, para que el joven al que la novia lo llama justo cuando está con los amigos chupando, se meta adentro y simule estar en otro lugar. El slogan de la bebida: “Por qué mentir, si podes teletransportarte”. Una vez ahí adentro, el pibe elige entre una gama de sonidos ambiente (ej. Gimnasio, dentista, internado (sic), embotellamiento, baño) y le dice a la chica que está “en el hospital” o en un “Bar Mitzvah”.

A ver… capaz yo soy medio suspicaz, pero hay un par de cosas que no entiendo:

1) Decirle a la persona que amas que estás internado en el hospital cuando en realidad estás con tus amigos en un boliche, ¿no es mentir? Pregunto… no sé… capaz alguien pueda explicarme entonces qué carajo es mentir. Ya mismo me voy a buscar la enciclopedia.

2) Si a vos te gusta salir a beber cerveza con tus amigos, ¿para qué te buscas una mina que te rompe los huevos? Hay mujeres que te dejan ir a chupar tranquilo.

3) Si a vos te gusta salir a beber cerveza con tus amigos, y no lo podés evitar, ¿para qué te ponés de novio? Te recomiendo que veas “Two and a Half Men” en donde Charlie Sheen demuestra que podés pasarte la vida catando whisky, sin comprometerte con nadie.

4) Según mi humilde opinión, muchos de los que entran al Teletransporter deberían estar agradecidos de que una mina les de pelota.

Y ahora, la pregunta más importante ¿Para cuando un Teletransporter para timar a tu jefe, la justicia, tus viejos, tus amigos y el resto de la sociedad? Claro, después cuando algún político nos engaña sin necesidad de meterse a un compartimiento acústico, uno se embola…
Así estamos, no nos quejemos.

Acá te presento la fantástica pieza de ingeniería. Imaginate si esta gente se dedicara a inventar aparatología para promover el bien común y curar enfermedades…


22 de abril de 2010

Carta abierta a Adrián Suar

A ver… no quiero se forra… pero… Suar: ya habías hecho “Malparida” antes. ¿No te acordás? Fue en 2006. La protagonizaban Nati Oreiro y Facu Arana. Se llamaba “Sos mi vida”. Está bien, algunos detalles están cambiados. Ella era boxeadora, de clase media-baja, y busca trabajo en la empresa de bienes raíces de él. El era hijo de un empresario, tenía una novia rubia mala (Carla Petersen), vestía trajes, era rico y había sido corredor de autos. ¿Qué pasó? ¿Te chorearon los guiones viejos?

Ahora Juanita Viale es una chica de clase media-baja que busca empleo en la empresa inmobiliaria de Gonzalo Heredia, que es el hijo del dueño, es rico, tiene una novia rubia mala (Carina Zampini), viste traje y corre en moto. Está bien, la Oreiro no buscaba vengarse de nadie, pero… casi, casi, Alcoyana Alcoyana.

A ver… no estoy pidiendo la superproducción de “Lost”, o la superguionada “Lie to me”, o una remake de “Los X Files” con efectos especiales y todo… pero… vamos… ponete las pilas. ¡¡Ya la vimos!! De onda.

21 de abril de 2010

Mi amigo Facebook

Hace un par de años una amiga, fanática de las relaciones sociales de cualquier estirpe, me recomendó que me uniera al Facebook. “¿Qué es eso?”, le dije. “Es como el Messenger, pero con fotos”, me respondió. “Naaaa, no me interesa”, contesté. Y no le di pelota. Eventualmente, cuando la mayoría de mis contactos empezó a mandar invitaciones por correo, sucumbí a la tentación de saber por qué tantas personas iban hacia el mismo lugar y decidí investigar sobre el tema. Finalmente, tarde pero seguro, terminé enganchada como una pelotuda.

Habiendo ya pasado un tiempo, tengo un par de preliminares sobre para qué sirve y cómo se comporta la gente en la red social más famosa del mundo.

Bien.

Están esos que aceptan TODO. No importa si son personas desconocidas, pervertidos, amigos de amigos que jamás hemos visto, grupos de lucha contra la injusticia animal en Indochina, etc. No le dicen que no a nada y tienen más amigos que Roberto Carlos.

Están también aquellos que comparten sus sentimientos más profundos con todo el mundo. Cada día amanecen y publican frases como: “Tengo frío”, “Qué larga y dura es la vida”, “Estoy contento”, o citan a cantantes famosos para reflejar su estado de ánimo, preferiblemente tipos sensibles como Sabina, y no toscos y atrevidos como Axl Rose.

Están también esos otros que lo utilizan como parte de su trabajo y cada dos o tres horas te cuentan qué es lo que hace su empresa, adonde están, de donde vienen, que van a hacer mañana. Insufribles.

Después están aquellos que juegan a Farmville, Mafia Wars, Qué se yo, y llenan el muro con animales para dar en adopción, pedidos de materiales, huevos de granja, puntos de juego, paquetes, etc. O peor aún, invadidos por una repentina fuerza adictiva superior a la que causa la heroína, inventan perfiles nuevos o le roban la contraseña a sus familiares para poder tener dos granjas y ganar más monedas, como para dar un ejemplo.

También están esos otros que no contestan tus invitaciones, pero tienen perfiles públicos y así vos te enterás que “Fulanito/a se hizo amigo/a de 25 personas”, pero a vos no te aceptó. Como si la indiferencia cotidiana no fuera suficiente, también existe la incuria on line.

O están aquellos, que perseguidos por el fantasma de la inseguridad informática, piensan que el Facebook se va a corporizar y los va a secuestrar a la vuelta de la esquina, por lo que destruyen todo su perfil, no se conectan jamás, no publican fotos y vos terminás sin saber quiénes son.

Y ni hablar de los ex despechados o despechadas, que utilizan tu perfil y tus datos para hacerte la vida imposible.

En fin, el Facebook te ayuda a encontrar familiares perdidos, que hace años que no ves, pero que tampoco verás nunca más; o compañeros del primario, que cambiaron sus fisonomías al extremo del desconocimiento y que planean reuniones del reencuentro, que jamás se concretarán.

Afortunadamente, existe una función pequeña que dice “OCULTAR” y en la que vos podés decidir a quién ver y a quién no, pero ojo, cuando te diste cuenta, de los 250 amigos que tenés, solo te quedan los mismos de siempre, esos que tenés en el teléfono y con los que te juntas a comer el fin de semana.

Y valga un consejo para aquellos, como una, que cumplen casi todos los mandamientos expuestos arriba: si terminás reemplazando a tus camaradas de carne y hueso por un software, al final el único amigo que te va a quedar es Facebook. Ironías de la vida, si las hay.

13 de abril de 2010

Y ahora, ¿quién podrá quedarse a limpiar?

El otro día, de visita en casa de amigos del sexo masculino, una de las chicas comentó -frente al quilombo reinante que había en la casa- que a los muchachos les vendría bien una mujer. Me la dejó picando. "Mmmmm. Una mujer… Si yo fuera esa mujer, el quilombo sería aún mayor", pensé. Y después me preocupé. Pero me preocupé no por ser una enquilombada, sino por esa ideología arraigada de las mujeres de asumir que deben ser ellas quienes ordenen los quilombos, limpien la cocina y planchen la ropa.

Instantáneamente, se me vino a la cabeza la publicidad de Mister Músculo, esa que cuenta la historia de un superhéroe de la limpieza, que llega como el Chapulín Colorado a auxiliar a una fémina en apuros, que lo necesita de manera urgente porque no puede sacar una mancha. Obviamente, Mister Músculo, que tiene más fibras que el pan de salvado, le hace entrega del producto a la mina y después sale corriendo para dejarla limpiando sola. Siempre me hago la misma pregunta: ¿Por qué coño no se queda y limpia él? Tanto músculo al pedo, quedate y pasá el trapo, pelafustán. Pero no. El final siempre es el mismo.

Ahí es donde yo entiendo que se pone de manifiesto esa estructura institucionalizada que sostiene que "el hombre no limpia". Puede manejar máquinas, submarinos, aviones, barcos, instrumental científico-tecnológico y viajar en cohete a la luna, pero se le queman los libros cuando tiene que enchufar una plancha y pasarla por encima de una camisa. Uno de esos misterios de la humanidad que ni Columbo podría develar.

Ahora bien, si haces un repaso por las publicidades actuales, lo de Mister Músculo es una fantochada. Hay otra mina que define “frustración” como no poder “sacar las manchas” (sic), y vos ahí decís “bueno, al menos la piba debe tener un sexo fantástico, un laburo de la puta madre y un jefe divino, porque si eso es lo que te frustra mamita, no sabés lo que es tener un problema”. Y ni hablar de las de yogurt, que se basan en datos científicos para sostener que todas las personas que sufren “tránsito lento” son minas, como si a los hombres no les pasara nunca. Etcétera.

En fin. Vamos chicas! Rompamos el molde, pero empecemos por casa, porque si seguimos pensando que a los hombres que viven solos les hace falta una mujer para vivir más prolijamente, no nos quejemos cuando nos tiren el pantalón para que se lo planchemos y después nunca nos llamen para pilotear un avión.

Yo, por mi parte, no compré ni compraré jamás Mister Músculo, al menos hasta que el bastardo no se quede a limpiar el piso, mientras yo me relajo leyendo una Cosmo.

6 de abril de 2010

A hibernar se ha dicho

Bueno, llegó el frío. Capaz se va unos días y vuelve con más fuerza en unas semanas, pero ese momento en el que sacaste un par de medias y revolviste el ropero para encontrar el acolchado con olor a moho y naftalina, es cuando te das cuenta que se terminó el verano. El día más triste del año. De repente es de noche y son solo las 6. A la mañana llorás para no salir de la cama y con el fin de juntar coraje se te vienen a la cabeza películas y series que tienen lugar en invierno: Nikita era una de ellas. Filmada en Canadá con 20 grados bajo cero y la guacha de Peta Wilson salía a la calle vestida con una camperita Dolce & Gabbana y pollera a matar terroristas. Esos son huevos y no macana. Otra. Secreto en la Montaña. Los dos vaqueros durmiendo en carpa bajo la nieve en Brokeback Mountain. Mierda… Ahí sí que hacía frío. Si ellos pueden, yo también…

En fin, después de hacer el duelo estacional este fin de semana, empecé a preocuparme por mis nuevas actividades nocturnas en el interior del hogar. Lo primero fue agendar el estreno de la remake de “V Invasión Extraterrestre”. Y ahí empezaron mis problemas (que cómo verás, son muy graves). A ver… de todos los días de la semana, los cráneos de Warner Channel eligen el martes a las 21. Justo cuando dan LOST, la última temporada de seis años de LOST. Ponete las pilas… Está bien que quieras hacer un poco de competencia, pero lo único que conseguís es un espectador menos. Nadie va a dejar de ver el final de LOST para ver V, que ya sabemos de qué se trata, que ni siquiera tuvo conclusión y que tampoco tiene a Donovan con los jeans ajustados ni a Diana con el catsuit rojo. Aunque las naves espaciales sean de la puta madre. Es pura lógica. Como cuando no tenés nada que hacer durante varios fines de semana. De repente se casan dos amigos y eligen el mismo día. Dejate de joder. Es la ley de “murfi” aplicada a la televisión. Yo debería laburar como gerente de programación de algún canal. Lo haría gratis.

Vi también que empieza algo nuevo de ficción en la TV abierta: “Malparida”. ¿A quién se le ocurre semejante título? Para ponerle Malparida, ponele Malcogida y listo. Los que titularon la novela seguro fueron los mismos creadores de la publicidad de Mister Músculo: unos feministas bárbaros. Otra cosa que haría gratis: laburar poniendo títulos a las novelas. Ya hago tantas cosas gratis... una más, una menos... Pero veamos… Actriz principal: Juanita “de madera” Viale. Actores principales (porque parece que va a haber un triángulo amoroso, algo nunca visto en las novelas): Raúl “todavía está vivo” Taibo y Gonzalo “te parto en 8” Heredia. Y ella que le pega cachetadas a ambos. Reminiscencias de aquellas bofetadas que se daban Kuliok – André en “Amor Gitano”. Esas sí que eran otras épocas. Ahora ya no podés cagarte a trompadas en la tele, se te vienen todos los organismos de defensa de los derechos humanos encima. Mostrar tetas y culos: sí; Ricardo Fort luciendo alhajas: sí; que Mister Músculo no se quede a limpiar: sí; pero violencia familiar: no. Ambigüedades bizarras de la sociedad actual.

Ya estoy delirando. Deben ser los primeros efluvios de la calefacción. Bueno, vamos a ver de qué se trata y después charlamos. Si no te copa la tele, hacete granjero de Farmville en Facebook. Te garantizo horas y horas perdidas de tu vida que no recuperarás jamás. Capaz se te pasa el invierno más rápido.

Hasta pronto. Creo que este blog está tomando otro rumbo y no sé adonde llegará. Ya veremos.