7 de septiembre de 2009

Domingo sangriento

El otro día tuve la suerte (¿?) de engancharme con la remake moderna de “La Masacre de Texas” (The Texas Chainsaw Massacre), una de esas de terror sangriento a las que ya no estábamos acostumbrados desde que Jason y Freddy se convirtieron en caricaturas y le dieron paso a los thrillers psicológicos del estilo de “Sexto Sentido”. En esta versión del filme, que supuestamente está basado en una historia real, un grupo de amigos (obviamente todos yankis, ellos facheros y con onda, ellas lindas y con buenos cuerpos) vienen viajando desde México en una traffic y de repente se cruzan con una mina que andaba como perdida en el camino. La suben al vehículo y la chica no tiene otra idea más glamorosa que volarse la cabeza y desparramar los sesos en el auto, con todos los viajeros mirando. Qué cosa espantosa…

Desde allí, se comienzan a suceder los hechos cruentos, que tienen un promedio de aparición cada 5 minutos y que son producidos por una suerte de monstruo (aka persona deforme denominada "Hombre de Piel") que parece que come carne humana, o algo por el estilo, y que se provee de la mercancía utilizando martillos, ganchos de carnicero y una motosierra ruidosa y efectiva.

Pero lo más interesante de esta película, además de ver sangre y muertes dolorosas, son los clichés que se siguen perpetuando a pesar del paso de los años y que han probado ser muy efectivos en ésta y en otras cientos de películas del género. Va la lista:

1. No importa cuán rápido pueda correr la víctima, el monstruo siempre lo hará más velozmente, aunque vaya caminando.

2. En vez de apurarse y salvarse, la víctima invariablemente buscará esconderse en lugares cerrados, de fácil ingreso y dificilísimo egreso.

3. No sé si serán los nervios o qué, pero siempre, siempre, cuando el asesino esté cerca, la víctima se caerá al piso.

4. La rubia, linda y con buen lomo, indefectiblemente será la que sobreviva al final. Es más, las probabilidades de morir en una de estas películas son directamente proporcionales a la fealdad o impopularidad de los personajes.

5. No importa cuán viejo o nuevo sea el auto con el que traten de escapar, nunca arrancará cuando es necesario.

6. Si alguien sospechoso te ofrece algo para tomar, no lo aceptes, porque seguro que tiene algún tranquilizante adentro.

7. Y a la pregunta “¿Johnny, eres tú?”, (generalmente pronunciada cuando se acerca un cuerpo irreconocible hacia la víctima), la respuesta es “No, no es Johnny. Es el monstruo”.

Lo más gracioso de este filme, es que tuvo una secuela: "La Masacre de Texas-El principio". Jejejeje. Casi como Batman.

Acá va el video de una de las muertes, pero no se lo aconsejo a personas impresionables.



6 comentarios:

Tanque dijo...

Genial! Para mi mas qeu de terror, fue pura comedia.. me mate de risa! POr momentos es tan obvia, que es imposible que no se te escape un chiste...Y si la ves con la companía que tuve yo..imposible no tentarte!

Vivi dijo...

AMO este género ... por más que dé para más de un análisis psicológico ... Texas en un clásico y si encima pensás que ese tipo existió ... ni que lo digas. Vi algunas recientes en esta línea ... y aunque mala ... para quien quiera ver espantosas escenas de muerte sangrienta recomiendo "El carnicero del tren de la medianoche" o algo así ... trabaja Brooke Shields y ese otro actorcito nuevo cara de nada Bradley Cooper...
E imperdible en el cine ahora : Sangriento San Valentin en 3D

Tati Sánchez dijo...

La camiseta blanca de Jessica Biel logra hacia el final de la película el mismo tono sucio, gris y sangriento que la camiseta de Bruce Willis en "Duro de Matar", pero eso sí, nunca, nunca, se le desprende el nudito de la cintura! Una maestra.

gringa dijo...

ja..ja..ja...!!!un aplauso!!la vi !!y creo que todo esta dicho!!lo del nudo es fenomenal!!!

Anónimo dijo...

la verdad que no es una mis peliculas favoritas pero tiene sus momentos.
para cuando el analisis del juego del miedo en sus 5 versiones.
besos tati
martin

Tati Sánchez dijo...

Martín, aunque no parezca, soy una persona muy impresionable, y "El Juego del Miedo" en todas sus versiones, me dio escalofríos... Vi la primera y segunda, y ya no vi ninguna más.